Hay personas que prefieren comprar sociedades limitadas ya constituidas antes que crearlas. Pero, ¿qué ventajas tiene esta opción?

¿Por qué comprar sociedades limitadas inactivas?

Cuando hablamos de sociedades inactivas nos estamos refiriendo a entidades o empresas cuya actividad económica ha cesado, pero no se ha procedido a su disolución. De esta forma, quedan en una especie de stand-by hasta que sean compradas por un nuevo socio y reactivadas otra vez.

Existen varias razones, mercantiles y fiscales, para comprar sociedades limitadas inactivas.

Menor desembolso

Una de las ventajas principales de las empresas ya constituidas es que no requieren efectuar un gran desembolso previo de capital social. El importe mínimo para la creación de una sociedad limitada ronda los 3.000€. Así que, si no dispones de este importe o prefieres invertirlo de otro modo, esta es una excelente opción. Por aproximadamente la mitad de ese importe, puedes tener la sociedad limitada disponible en un plazo inferior a 48 horas.

En el caso de las sociedades (anónimas o limitadas) de mayor capital social, el ahorro también es importante. Por ejemplo, en el caso de una sociedad anónima, que requiere un desembolso de hasta 60.000€, se puede comprar por tan solo unos 3.000€.

Rapidez

Como hemos mencionado, la velocidad del proceso es un punto muy favorable. Este tipo de compraventas se pueden hacer incluso en 1 hora. La sociedad está a punto para ser vendida, por lo que solamente hay que asistir a una notaría, abonar el pago correspondiente y firmar la documentación necesaria.

Antigüedad

Muchas de las personas que eligen comprar sociedades limitadas inactivas lo hacen por la antigüedad que ya tienen. Esto a veces es un plus de confianza y prestigio ante los proveedores. Es bastante habitual que para trabajar con determinados proveedores o con el estado, se solicite una trayectoria mínima de años con un capital social y un volumen de facturación mínimos. Por ejemplo para optar a ciertos concursos públicos que ofrece el estado, se suele exigir cierta antigüedad como requisito imprescindible. Por lo que comprar sociedades limitadas inactivas implica disfrutar de ciertos beneficios.

Confidencialidad

Cuando se realizan este tipo de compraventas, los socios nuevos no constan en el registro mercantil. Estos cambios no se pueden inscribir así que los datos no serán públicos.  Unicamente constarán en el libro de socios y en los registros notariales.  De esta forma, es prácticamente imposible que se sepa quien es socio de la empresa, por lo que la confidencialidad es absoluta.

Obviamente en casos particulares se puede exigir judicialmente al notario que aporte las escrituras. Pero en circunstancias normales el anonimato está asegurado.

Como vemos, comprar sociedades limitadas inactivas tiene muchas ventajas frente a la alternativa de constituir una sociedad desde cero.

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